En el CES 2019, la empresa TCL presentó varios productos. Al ver los dispositivos, quedé un poco desubicado ya que la compañía no tenía un posicionamiento muy claro en mi mente y en mi interior existía curiosidad por saber cómo serían sus productos y cómo funcionarían. Es por ello que analizamos en este artículo la nueva televisión TCL EP68.
Es ahora cuando las marcas menos conocidas están haciendo unos esfuerzos titánicos en crear buenos productos y, sobre todo, a buenos precios. Es una de las técnicas que le podrían salir bastante bien con el televisor TCL EP68 que tuve el placer de probar durante un mesecillo.
Índice de contenidos
Ficha técnica de la televisión TCL EP68
[jtrt_tables id=»12466″]
Un televisor a la altura de las grandes marcas
Lo cierto es que el producto de prueba llegó en el mejor momento posible. Durante todo el mes de enero y bien entrado febrero, estuve con una gripe bastante fuerte que me tuvo en casa durante mucho tiempo. Gracias a ello, he podido sacar el máximo provecho a este televisor de TCL.
No, no era el bicho que ahora está tan de moda, o eso creo, si lo fue, pues mira, ya estoy inmunizado. Fuera como fuese, ese tiempo de probar el televisor vino clavada, podía utilizarlo durante bastante tiempo de ocio ya que, trabajando desde casa, como que acabas teniendo más tiempo para ti.
Y el resultado fue sorprendente. Teniendo en cuenta que cuando miro televisores para comprarme soy como un burro cuando le ponen las anteojeras; solo veo una que me gusta y no suelo salir de ahí.
Sin embargo, la compañía TCL ha hecho replantearme algunas cosillas que vamos a ir viendo a lo largo de este análisis.
Toda una declaración de intenciones desde su montaje
La compañía TCL adquirió BlackBerry para hacer sus inversiones en Occidente queriendo llamar así la atención, al menos de los medios, y de los inversores europeos y estadounidenses.
Lo cierto es que esta debía ser la estrategia que la asiática debió seguir porque al final BlackBerry no encontraba su mercado, porque no existía, y ahora en agosto de 2020, TCL se desprende de ella por completo, vaticinando el final real de la compañía.
En el CES 2020, la compañía quiso anunciar una gama de televisores con unas prestaciones de alta gama a un precio parecido al que ofrecía la competencia. Hay veces que pueda parecer que poner un precio de un iPhone a un Xiaomi no resulta, pero funciona más de lo que nos pueda parecer; aunque del precio ya hablaremos. Eso sí, la empresa debe justificarlo con medidas que los consumidores sean capaces de notar.
Desde luego han sabido hacerlo, al menos, en el primer vistazo y donde pasaremos el rato que más grabado se queda. En su montaje, en la calidad percibida del producto a la hora de sacarlo de la caja y montarlo. Lo cierto es que se me hizo un poco tediosa la manera de montar la peana de la TCL EP68.
Sobre todo, porque el panel es de 50 pulgadas, no pesaba poco precisamente, y el montaje de la peana no estaba demasiado claro. Sin embargo, a su vez, esto hacía ver que la calidad era superior a la que podemos encontrar en otras marcas generalistas. Metales pesados, duros y de buena calidad para sostener el peso y saber que la televisión de TCL no se iba a caer aunque tu casa tiemble como una gelatina de 20 céntimos.
La calidad de imagen en la TCL EP68 demuestra el punto anterior
Si ya con el montaje veíamos que sus piezas eran de una calidad bastante alta, solo quedaba que cuando se encendiera, esto se viese demostrado por algún lado. Y es que esta televisión de la marca china TCL ha dado en la clave con la tecnología del panel y en sus distintas configuraciones a través de perfiles, según las necesidades de lo que estemos visualizando.
De esta forma, podremos cambiar los perfiles a nuestro gusto para así disfrutar de películas, de jugar a videojuegos o de, sencillamente, ver la Televisión Digital Terrestre; sí, que el TDT todavía existe…
La TCL EP68 cuenta con una tecnología LED, en nuestro caso de 55 pulgadas, con resolución UltraHD. Es decir, disponemos de un panel 4K combinada con HDR10+, HDR Pro y tecnología combinada de Dolby. Por un lado cuenta con Dolby Vision para mejorar la calidad de imagen y, además, con tecnología Dolby Atmos para el sonido. Lo increíble de este televisor es que se ve sumamente bien en un panel ultra fino y con unos márgenes irrisorios en el marco delantero.
También mencionar que se dispone de diferentes tamaños de panel, empezando desde las 50 pulgadas pasando por las 55 hasta llegar a las 65 pulgadas.
La inteligencia es lenta, pero bastante funcional
Si compras un televisor hoy en día, más vale que sea Smart TV. Pero no cualquiera. Por favor, si la marca no es de las grandes, sólo hazlo si cuentan con Android TV como sistema operativo. Bueno, y aunque sea de las marcas conocidas, también.
Ya sé que esto atenta contra todos mis otros artículos donde abogo por acabar con el monopolio de Google y sus sistemas en todos lados que acaban siendo una extensión de nuestra vida; pero es que son los únicos que lo hacen bien. Siempre y cuando tu vida no gire entorno a Apple, que entonces, tendrás que comprar el Apple TV, gastarte un dineral para ¿reinteligizar? a la televisión, en fin…
Afortunadamente, este es el caso de la TCL EP68. Cuenta con Android TV, tecnología Chromecast integrada, el asistente de los de Mountain View y además también funciona con Alexa y certificación para hacer funcionar Netflix. Así que, todo genial y perfecto para disfrutar del contenido multimedia. Pero como todo en la vida, nada es perfecto. Y es normal.
La TCL EP68 es un televisor inteligente con bastantes funcionalidades como para despreocuparte de tener que utilizar tu ordenador y/o dispositivo móvil para ver algún tipo de contenido multimedia en streaming.
De hecho, lo hace con decisión pero con un retardo que no termina de convencer. Funciona todo aunque con lentitud a la hora de abrir aplicaciones o cambiar entre ellas. Una vez dentro de YouTube, Netflix o cualquiera de ellas, se mueve con soltura.
Creo que esto sucede por culpa del procesador de cuatro núcleos que monta, que no será lo más potente y su capacidad de almacenamiento de 16 GB. Es cierto que las aplicaciones para televisores inteligentes no ocupan tanto espacio como las de los dispositivos móviles, pero todo el mundo sabemos que si el almacenamiento no es SSD, los 10 GB libres que le quedan al televisor, cuando se ocupe un poco, va a ralentizarse. Esto es algo lógico.
Aunque lo bueno, es que cuenta con una de las mejores actualizaciones que ha tenido Google para su software móvil. Ya de entrada ejecuta Android 9.0 y un mando minimalista, chiquitito que es para comérselo y que me encantó porque no se necesita más. Aunque también trae uno inmenso, típico para ver la televisión pero que a título personal no usaría.
A TCL sólo le queda una actualización de hardware para darle en la cara a las marcas más grandes
Este televisor podemos encontrarlo en unos precios medios desde algo menos de los 500 euros para el modelo más ‘pequeño’, de 50 pulgadas. Un precio bastante contenido y que teniendo en cuenta todas sus tecnologías, en otras marcas podrían subirse bastante a la parra.
Pero es que TCL está jugando, a nivel de marketing, con otro tipo de variables. La empresa se encuentra aprendiendo de los análisis e intentando tener un feedback por parte de los usuarios de la marca, y gracias a ello podrán posicionarse y anclarse donde quieren.
Por un lado, las tiendas ubicarán este televisor en el mismo rango de precio que la competencia. Al ser una marca menos conocida, llamará más la atención y acabarán preguntando por ella. Esto mismo sucederá en los filtros de las tiendas en línea, y que harán que los consumidores busquen información para ver si merece o no la pena adquirir el producto. Esa búsqueda ayudará que el algoritmo tenga a TCL más en cuenta para su reciente modelo EP68 o para cualquier otro producto.
A la compañía sólo le queda encontrar alguna empresa proveedora de paneles para mejorar la tecnología LED y aventurarse a otros mejores, pero a un precio contenido como en este modelo. Encontrar procesadores mejorados para evitar ese retardo en la apertura y cambio de aplicaciones, atraerá más a los consumiros.
Incluir el cableado completo para disfrutar del televisor como un cable HDMI, otro cable de audio y la inclusión de USB C con un cable USB C a USB C incluido. Estos detalles hacen mucho por mejorar la imagen de marca.
Entonces, ¿recomendamos la serie TCL EP68?
Sí, por supuesto que podemos recomendar la serie de televisores de TCL sin equivocarnos teniendo en cuenta lo que se ha dicho a lo largo de este análisis, que ya supera las 1600 palabras.
Son este tipo de marcas que denotan querer hacerlo bien y aprovechar todas las tecnologías que han ido funcionando para implementarlas y hacerse un hueco. Yo, espero verla crecer porque creo que tiene bastante potencial y así aumentar un poco la cantidad de posibilidades de los consumidores.
Porque sí, marcas chinas de televisores hay a patadas. Pero puedo poner un ejemplo claro sin hablar de marcas. Hay una marca china ultra conocida en este mundo de los televisores baratos, aunque TCL no entre dentro de este marco, con tecnologías que hacen inteligente su televisor pero que el panel es un fiasco.
En mi caso no ahorraré dinero en una televisión, esto lo tengo muy claro. Es un elemento que tiene como intención durar más de diez años y eso es tiempo donde tu salud oftalmológica ha estado en juego.
Según muchos estudios, se estima que dedicamos aproximadamente una hora y media a las redes sociales de forma diaria. Imagínate las que echamos viendo series, películas, programas o cualquier contenido multimedia en televisores o pantallas.
Por ello, personalmente prefiero invertir en la calidad de un buen panel a tener que hacerlo a largo plazo en gafas, lentillas o renovación de otro televisor. Por último, puedes adquirir el televisor de 50 pulgadas por 479,99 euros. Si prefieres ir a por el modelo más grande, las 65 pulgadas tiene un coste 703 euros.
¿Quieres recibir la mejor información sobre tecnología?
Disfruta de las noticias destacadas de cada semana directamente en tu correo para estar siempre informado.
Deja una respuesta